Si llevas años sufriendo afecciones cutáneas, desde acné hasta eczema, tienes que empezar el nuevo año rewilding.
Tu piel alberga un ecosistema, como el de una selva tropical o un arrecife oceánico. Los microbios naturales de la piel forman una ecología compleja en un delicado equilibrio. Cuando alteras este equilibrio natural con productos para la piel nocivos y cargados de sustancias químicas, el ecosistema resulta dañado. Dado que el microbioma cutáneo es tan importante para mantener la piel sana, este daño puede provocar problemas en la piel.
Afortunadamente, existen técnicas para restablecer el equilibrio microbiano y que la piel pueda protegerse de forma natural. Significa adaptar un poco tu estilo de vida, solo unos pocos cambios simples pueden marcar la diferencia en la salud de tu piel en 2023.
1. Días sin maquillaje
Con el trabajo a distancia e híbrido cada vez más común, hay muchas más oportunidades de evitar el maquillaje en determinados días. Cuanto menos maquillaje lleves, menos limpieza necesitarás, lo que es una buena noticia para tu microbioma. Sin las molestias del maquillaje y la consiguiente limpieza, tu piel empezará a regenerarse. Deja de maquillarte un par de días y verás los resultados.
2. No te limpies en exceso
Una creencia muy extendida es que limpiarse constantemente es la forma más higiénica de vivir. La piel trabaja duro para producir aceites valiosos, como lo ha hecho durante 2 millones de años. Al limpiarla en exceso con productos dos veces al día, estamos eliminando estos aceites y la protección que proporcionan. En lugar de eso, lávate la cara con agua tibia todas las mañanas.
3. No desinfectes en exceso
La pandemia ha provocado un aumento masivo de los agentes antibacterianos y, aunque tienen su utilidad, desinfectar en exceso la casa puede ser muy perjudicial para la piel. Todos nos hemos pasado los últimos tres años desinfectando en exceso y hemos experimentado sequedad y enrojecimiento como resultado. Si necesitas desinfectar, considera la posibilidad de utilizar opciones ecológicas que sean mejores para ti y para el medio ambiente.
4. Evita el azúcar
El azúcar es perjudicial para la salud, incluida la salud de la piel. El azúcar descompone el colágeno y la elastina que dan a la piel su estructura y firmeza. Así que, como propósito de Año Nuevo, plantéate reducir -o eliminar- el azúcar de tu dieta.
Nos hemos desconectado demasiado del mundo natural, a pesar de que es increíblemente beneficioso para nuestro bienestar mental y físico. El mundo natural está repleto de microbios beneficiosos que interactúan con la piel de forma saludable. Es algo que los productos manufacturados no pueden reproducir. Sal a la naturaleza y revive tu piel mientras bajas los niveles de estrés y mejoras tu estado de ánimo.
6. Disfruta del sol
Cuando pases tiempo al aire libre, debes reservar al menos 15 minutos de ese tiempo sin protección solar. El motivo es que la vitamina D es increíblemente beneficiosa para la salud, incluida la de la piel. No te sobreexpongas y te quemes con el sol -ya que eso causará más daño que beneficio-, con un cuarto de hora bastará.
7. Actívate
Hay que hacer ejercicio. Es bueno para el cuerpo, para la mente y para la piel. El sudor libera las toxinas acumuladas y el aumento del ritmo cardíaco incrementa el flujo sanguíneo por todo el cuerpo, lo que se traduce en una piel más sana.
8. Incluye omegas
Los omega 3 y 6, presentes en el pescado fresco, los huevos y las semillas, son importantes para la salud de la piel. Estos aceites de calidad son utilizados por la piel para apoyar la función de barrera y el microbioma.
9. Revisa tus productos de cuidado de la piel
Por último, fíjate en los ingredientes de tus productos actuales para el cuidado de la piel. Si utilizas productos que no son orgánicos, naturales y respetuosos con el microbioma, puede que sea el momento de reconsiderar tu régimen de cuidado de la piel. Para equilibrar el microbioma y mejorar la salud de la piel, se necesita una gama de productos probióticos naturales como Esse.